Asiento a tu pasado
y acepto tu presente
porque el mío es tu cuello
tu voz, tus secuencias
un rayo que parte mi pecho
y te lo regala
para que lo uses
lo ames y lo odies
y si un día te vas
no voy a llorar
sino a partir tu pecho
para quedármelo
usarlo
amarlo y odiarlo
así con todo
hasta partirte el corazón